Contenidos en Facebook y los factores de conversión en tu landing page

Los contenidos en facebook y los factores de conversión en tu landing page que afectan directamente tu posicionamiento y objetivos dependen de dos grandes fenómenos (suponiendo que el check list técnico se haya cumplido antes) : la calidad y la curiosidad.

Factores de conversión

Compartir trozos de contenidos capaces de sacar al usuario de la red social y «aterrizarlo» en tu landing page y generar por lo menos un tiempo de visita decente, implica tener a punto una serie de factores de conversión básicos que determinan alcanzar un objetivo (un «me gusta», una suscripción, una visita cualificada, incluso una venta). Alcanzar un objetivo y reducir el rebote. Los contenidos en facebook y los factores de conversión que determinan las acciones de los usuarios, en la red social y también en las landing pages, son una cuestión de comportamiento humano digital.

Qué contenido compartir, a qué páginas llegan las visitas, y los factores de conversión, son tres estados de cualificación. Cada uno lleva al otro. Facebook (o cualquier otra red social) sirve como trampolín, para que los trozos de contenido que compartes hagan saltar al usuario hacia tu sitio. Lo que se comparte en Facebook es un primer estado de cualificación, la página donde llega otro, y el valor del contenido con la acción final (una suscripción, una venta) son el tercer estado).

A la base de todo esto hay solo una cosa: la calidad del contenido. Pero la calidad quiere decir muchas cosas. No obstante, basta decir que no solo está la calidad estética, sino la sustancia, el valor que aporta esa información, la razón por la cual merece la pena leerlo y compartirlo, la manera en que abre mentes, su capacidad de sorprender. No es una sorpresa que en el ámbito del marketing de contenidos, la calidad del contenido y de su presentación determine la conversión. Lo que sorprende es que no se haga mucho. ¿Por qué no se hace mucho?

Los factores de conversión y engagement que se quieren resaltar en esta entrada son los siguientes, y el reto es que deberían verse reflejados en las dosis o trozos de contenido que se comparten en las redes sociales:

• Distintivo visual
• Imágenes con significado
• Gráficos, infográficos y/o videográficos
• Impresionante calidad del contenido, de los textos y de la redacción
• Contenidos en clave SEO sin caer en la redacción no natural
• Continuidad en los contenidos
• Excelencia en los copys, los títulos y en la redacción
• Botones útiles
• Formularios bien diseñados
• Innegable relevancia del servicio de boletines

Marketing de contenidos vs link building

Hablar de la calidad del contenido como recurso esencial para una estrategia de conversión, de relevancia y reputación online, implica afirmar que el marketing de contenidos tiene un gran potencial de posicionamiento. Incluso tanto y más que estrategias de posicionamiento que dan demasiada relevancia al link building. Los dilemas entre uno y otro son comunes. Simplemente comparto este video de Moz sobre el tema, y compartiéndolo doy la razón a los chicos de Moz cuando apuestan por la creación de contenido realimente valioso (además porque el link building se está resagando como estrategia de posicionamiento).

Aportar valor como estrategia de crecimiento y diferenciación. De ahí una de las preguntas en el gráfico de más arriba: ¿Cuál es el valor único que está dando este contenido?

La curiosidad mató al gato ¿si?

Basados en la capacidad de sorprender y de activar la curiosidad, se ven pulular en Facebook y en las redes sociales cualquier cantidad de imágenes y frases inspiradas en la provocación, el sensacionalismo y en la seducción (esto lo diría Baudrillard). Son contenidos incompletos que mueven profundamente la curiosidad y el voyeur interior que todo ciudadano del siglo XXI tiene adentro. No importa que no sea un contenido profundo, ni original, ni basado en investigaciones serias, ni siquiera real, no. Aquellas estrategias simplemente optimizan, y en alto grado, el tan conocido amarillismo periodístico.

Una imagen con una sugerencia sexual, una frase incompleta, una tragedia a punto de suceder pero que para verla hay que hacer clic, un milagro a punto de suceder, una hazaña superhumana a punto de acontecer, cosas que queremos ver, desde las más básicas a las más complejas, desde un pezón hasta ver el mundo explotar. En otra entrada profundizaré sobre el amarillismo y el sensacionalismo en las redes sociales.